El presidente Abinader está satisfecho con lo que se ha logrado en los nueve meses que lleva el régimen, aunque no está conforme, según el resultado del “retiro espiritual” que llevó a cabo con sus funcionarios el fin de semana pasado, durante el cual se analizó casi todo.
Abinader reunió en los salones del Ministerio de Relaciones Exteriores a la mayoría del Gabinete, los directores de las oficinas recaudadoras, los superintendentes, el sector económico y el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu.
“Fue una evaluación de los primeros nueve meses del régimen que se cumplen la semana entrante y allí se estudiaron las metas alcanzadas, las que no se han logrado y lo que debe hacerse de aquí al 16 de agosto cuando se cumpla un año de ejercicio”, dijo una voz autorizada.
Con lo logrado por su gobierno desde el 16 de agosto de 2020, Abinader podría sentirse satisfecho, porque la pandemia del COVID-19 equivalió, guardando las diferencias, a la devastación de San Zenón que encontró el gobierno que se había inaugurado en 1930.
El manejo de la pandemia, los grandes esfuerzos para conseguir las vacunas que hoy están siendo aplicadas a toda la población y el sacrificio que ello ha conllevado, sin que el país recibiera el auxilio de naciones amigas como Estados Unidos que ha acaparado las suyas, eran los temas del momento.
La reunión no solamente fue para que los funcionarios se vieran las caras, sino para que se recordara el énfasis que se ha puesto en la transparencia, la ética y que no hay vacas sagradas cuando se cometan errores respecto a las normas de compras y contrataciones.
En la reunión se pasó revisión a los planes para mejorar el empleo y la apertura que ha tenido el sector turismo y la mejoría del ingreso de divisas, según lo ha informado el Banco Central. Algunos de esos puntos fueron socializados con cuatro técnicos internacionales.
También participaron expertos locales en materia de contrataciones, presupuesto y finanzas. La pandemia le ha impedido al régimen de Abinader llevar a cabo todo lo propuesto, como la reforma policial, la lucha contra la delincuencia y la inseguridad.
Herencia escandalosa
El régimen de Abinader recibe en estos días una herencia escandalosa de las anteriores autoridades, como que se reveló desde la Procuraduría General de la República, al llevar a la justicia la investigación del Caso Coral, una trama que supuestamente dirigía el general Adán Cáceres.
Fuente: Listin Diario